Cobardía

Que sigo aquí ¿Sabes? Que no me he podido marchar a pesar de que parezca que sí, que los fallos que uno comete los lleva dentro, guardados en su interior y solo para él, las decisiones tomadas pueden ser erróneas o acertadas, pero son decisiones, cuando te equivocas de forma estrepitosa tienes que aceptar el fallo e irte, irte a un sitio en el que intentar relajarte, en el que esconderte del mundo, es cierto, que eso lo hacen los cobardes pero a veces es la opción más valiente que te encuentras, será por eso que hoy sigo aquí, escondido de todo y con miedo a salir, con miedo a expresar lo que siento, miedo a decir que me equivoqué, que actué como un cobarde o que quizás la situación interna que vivía me hizo comportarme así, nosé, no trato de excusarme ya que cada cuál es dueño y señor de las acciones que realiza y no importa el momento, ni la situación en la que estés ya que la responsabilidad es tan solo tuya. Dices que estás bien tal y como estás, aparentas que nada te importa pero es tan solo una careta bajo la que se oculta una mente llena de incertidumbre, con heridas de un pasado que raramente se borrarán, con llantos de un presente que amargan un futuro y con el miedo a vivir equivocadamente, y es que cualquier suspiro, cualquier palabra puede sentar mal y eso te hace vivir con la desconfianza de que en cualquier momento te vas a equivocar y es por el miedo a perder por lo que no ganamos nunca, por lo que la vida nos dá la espalda y nos condena a vivir presos de nuestra propia mente, no hay utopía, no hay mundo de las maravillas ni un buen presente con un pasado agitado y eso hace que el futuro vaya tomando mala forma nuevamente. Mientras tanto sigues sentado y lleno de cobardía, la valentía y el orgullo que parece ser te habían definido a lo largo de toda tu vida han desaparecido en un instante, no hay rastro de eso ahora que es cuando más lo necesitas y será por eso por lo que vives día tras día lamentándote en silencio, ahogando tus penas en cualquier vaso que tenga unos grados de más, o tras una cortina de humo aún sabiendo que esa no es la solución y que cada paso te hundes más en el barro, estás tocado, muy tocado y sientes que poco a poco te vas hundiendo más. No hay fuerzas para continuar en pie y echas de menos esas charlas, esos consejos, esos abrazos, esa ayuda que siempre te proporcionaba y todo, todo lo has echado tú de tu vida y querido amigo, quizás hayas tirado por la borda la oportunidad de poder tener algo más que besos y abrazos, pero claro, eres así y es una lástima que ella que conoce los motivos que te empujan a ser diferente, ella que es la única que conoce todos tus secretos, haya sido a la que tú has echado de tu vida sin más, ahora ¿Qué? No puedes pretender actuar como el que no ha pasado nada y cambiar todo en un par de días con un lo siento, con un perdon, o con un sigo queriendo lo mismo aquel último día de colegio, no amigo, la vida no es tan sencilla y el dolor no se elimina tan rápido, vuelves a estar jodido como siempre, y como siempre, solo estás jodido en tercera persona...